CARRUSEL: Morenistas en el Congreso: Calladitos se ven más bonitos

Diputados Morenistas: Ahora fingen demencia

Por Víctor Fausto Silva Duran:

La sesión que celebró este martes el Congreso del Estado para reorientar más de 500 millones de pesos del presupuesto hacia la atención del coronavirus, no hizo sino evidenciar que aún cuando el rancho esté ardiendo, nuestros políticos no desperdiciarán jamás la oportunidad de armar la moquetiza para sacar raja política.

Los diputados están viendo que a nivel nacional menudean las protestas porque el gobierno se está viendo lento a la hora de soltar fondos recursos y conseguir equipo para los hospitales, y cuando la Gobernadora puso la pelota en su cancha lo que hicieron fue tupirse duro y macizo, especialmente los morenos y los azulados.

Como los primeros siguen aferrados a que Claudia Pavlovich voltee hasta las piedras para sacar recursos antes que molestar a Su Alteza Serenísima López Obrador, se mantuvieron en sus trece de no aprobar más endeudamiento, pero muy orondos pasaron por alto que meses atrás ellos mismos lo palomearon.

En ese entonces y ante los feroces recortes de presupuesto federal, le aprobaron a la Gobernadora que echara mano de un crédito de mil 300 millones de pesos, pero luego –ya metidas “las cuatro”- dijeron que en su candidez y pureza habían sido vilmente chamaqueados, sólo que la dirigencia de Morena paró oreja y ante sospechas de entreguismo, incluso anunció una investigación, por aquello de que los hubieran “maiceado”.

A estas alturas es hora de que la dichosa investigación no da ni para atrás ni para adelante, mucho menos resultados definitivos o sanciones, pero este martes, como si nunca hubieran cometido tan garrafal pifia, los morenistas salieron a rasgarse las vestiduras gimoteando contra el endeudamiento del Estado.

Obviamente se desató el fuego cruzado, y ante la embestida de priistas y panistas que los etiquetaron de traidores, la coordinadora de la bancada morenista, Ernestina Quintero, también echó mano de las redes sociales para defender a los suyos, pero en honor a la verdad calladita se hubiera visto más bonita.

Porque mire usted lo que redactó en la parte esencial de su comunicado en Facebook:

“Votamos en contra de la propuesta del PAN que pretende redireccionar el 40% de los 1,300 millones de pesos que se le aprobaron en diciembre a la Gobernadora CPA para que contratara créditos (deuda). NO lo aprobamos porque consideramos inviable ya que de momento es un crédito que NO se ha materializado, por lo tanto no se puede disponer de ese recurso”.

Ernestina Castro: ¿Pa’qué tanto brinco?

Doña Ernestina salió bastante malita para el manejo de los verbos en plural, porque en un gesto de honestidad, donde escribió “que se le aprobaron en diciembre”, debió decir “QUE LE APROBAMOS en diciembre”, porque así fue, aunque ahora quiera escurrir el bulto.

En cuanto a que es inviable porque el crédito “no se ha materializado” y por ende “no se puede disponer de ese recurso”, es un argumento baladí e infantil: si la Gobernadora está pidiendo al Congreso la reorientación de esos recursos para atender la emergencia, es ooooobvio que echará mano de él.

Doña Ernestina se enredó o quiso enredar al respetable: Claudia Pavlovich no le está pidiendo autorización al Congreso para contratar créditos: los diputados (incluidos los de Morena) se la otorgaron ¡desde diciembre!

Entonces, ¿pa’qué tanto brinco estando el suelo tan parejo?

Como parte de esa estratagema de maquillar torpezas, los morenistas centran su postura en exigir a la mandataria que prácticamente se faje sola ante la emergencia sanitaria y económica que ya se dejó venir.

O sea: aquí hay que rascarse solos, con tal de no molestar a El que todo lo ve y Todo lo sabe, no vaya a ser que les retire su bendición.

Bonita idea sobre la indispensable y urgente coordinación entre todos los niveles de gobierno, para enfrentar un problemón que pondrá de cabeza no sólo a Sonora, sino al país entero.

Diputado Raúl Castelo: ¿Está poseído?

¡Ah!, pero eso sí, y a contrapelo de lo que López Obrador dicta desde el púlpito, de que aquí todo está bajo control y no pasará nada porque su gobierno le está poniendo el ejemplo al mundo, el diputado de Morena, Raúl Castelo Montaño, presentó un exhorto al gobierno, a las universidades y a los funcionarios del sector salud, para que saquen de los hospitales a los estudiantes de medicina y enfermería que están en prácticas.

¿El motivo? Sus padres están preocupados porque no se les prepara ni se les brinda el equipo protector indispensable para enfrentar la pandemia.

“Padres de familia de Ciudad Obregón han mostrado su preocupación hacia sus hijos debido a la falta de equipamiento. En una visita que realicé a hospitales, los médicos me comentaron que no es recomendable que el alumnado siga en los nosocomios y que incluso es una imprudencia, debido a la falta de equipo, aparte de que no se tiene tiempo para que los especialistas los orienten y enseñen”, dijo.

¿Pues qué no andamos “requetebien”, súper equipados y dándole ejemplo al mundo de cómo se enfrenta una pandemia? ? No serán Fifís esos padres?

¿Se le habrá metido al diputado Castelo el espíritu de algún conservador neoliberal?

La doble cara, pues: les molesta que a falta de apoyo federal la Gobernadora busque echar mano de lo que se pueda, pero muy dentro de sí saben que andamos bastante lejos del paraíso que nos vende López Obrador.

Dios guarde que algún diputado de Morena se contagie de coronavirus, porque entonces sí podrá atestiguar de primera mano y no de oídas la abundancia de camas, equipo y medicamentos que tanto pregona el iluminado de palacio nacional.

O lo que es lo mismo: tendrán el nada aconsejable privilegio de ver al diablo por un agujerito…

Víctor Fausto Silva Duran

periodismocomoes@gmail.com